miércoles, noviembre 13, 2013

Tres

-->
Actúa con la bipolaridad propia de los niños de su edad,
grita, se carcajea,
golpea, me abraza a ciertas horas,
a veces me ama, otras me odia,
y algunas cuantas me dice que ya se hizo pipi…
Productor innato de travesuras ligadas al peligro físico,
ensayista desfachatado de su perfil artístico;
la paz llega hasta que duerme, el día es una revolución,
una revuelta que educa, que transmite,
que permite sonreír o cantar una canción;
armados hasta los huesos, golpeándonos de frente,
con los brazos rodeando el cuello,
con besos ensalivados que no se ven ni en sueños.

Corre como el viento,
brinca hasta el cielo,
imagina monstruos,
revela su inocencia,
se cansa y se acuesta a mi lado,
me roba la almohada,
viajamos a un lago,
musical, con noviembre al costado.
*                                    *                                    *
Su pregunta mas frecuente es: ¿Por qué?
Y eso genera una gran responsabilidad de nuestra parte,
a lo cual tratamos de responder con la verdad, de la manera más adecuada y entendible; pero para él siempre será necesario preguntar de nuevo: ¿Por qué?

martes, agosto 06, 2013

¿ ?


Atraparte entre 4 paredes,
quedar entre sombras,
y golpearte el cráneo para sonorizar el momento...
¿Así es el amor?
¿Con esa frase se derrite el músculo?

La mujer está pariendo filtros,
el primogénito conservará la mala actitud,
el hombre ha usado su miembro por las noches,
¿Así conciben a la familia?
¿Consideran adecuado dar pasos diarios hacia el abismo?

Las ganas envejecen,
debajo del agua ella puede respirar,
por encima del hombro él puede disparar,
¿Pretenden subsistir o disfrutar?
¿Cómo pueden verse al espejo?

Océanos de deseos infantiles,
charcos de disfunciones reales,
modernas, etéreas,
eternas.

¿Quién abandona a quien?
¿Quién de todos sobrevivirá?



martes, junio 25, 2013

Más de 3 años

Han pasado más de 3 años y Alondra ilustra
con lujo de detalle su pesadilla recurrente;
se ve formada en la larga fila de las victimas de tu ausencia,
con los pies hinchados, los parpados secos, el torso chueco,
esperando su turno para corretear a tu sombra por toda la casa.


“Son demasiadas flores ya,
muchos litros de alcohol sobre su lecho,
mares de notas musicales que se contaminan con el gran
estruendo del siguiente avión que llega a la ciudad”,
relata la mujer entre sollozos.

Y se molesta,
y desea molestarte,
pero no contestas,
y se pregunta,
y te mira fijamente por horas en la fotografía más íntima,
pero no obtiene respuestas;
y se duerme insatisfecha,
y sueña que despiertas,
pero abre los ojos de madrugada,
la pesadilla ha vuelto a surgir.

Han pasado más de 3 hombres en su vida después de ti,
pero Alondra no te encuentra en la sonrisa sarcástica de ningún otro,
después de un orgasmo comprende que tiene necesidad de continuarte deseando,
se levanta de la cama, se lava los muslos y se desvanece de nuevo,
solo para sortear otra noche sin ti.

“Sus huesos golpeaban fuertemente contra mis nalgas,
gritaba mi nombre, apretaba mi vientre y vertía sus ganas en las mías,
después de un silencio aural
se fumaba mi cabello, mientras yo descansaba para enfrentar el siguiente vendaval;
soy de él, eternamente,
él es polvo,
tu eres cruel, siempre con esa mirada fulminante, desacreditándome”,
me cuenta en secreto y me reclama, mientras se desnuda lentamente.

Hermano, Alondra en verdad te extraña.

 

martes, abril 16, 2013

Actualidad percibida


En boga la retorica de los mudos,
el derecho confundido con la obligatoriedad,
el izquierdo aceptando la alianza que le brinde comodidad,
muros que emergen desde bajo tierra tras la nula respuesta de la oligarquía.

Una serie de propuestas ultrajadas,
los que marchan en domingo han logrado gastar más que los que no,
a cada minuto una venganza frustrada.

























Imagen: Andrés Rábago García "El Roto"

martes, marzo 12, 2013

¿Qué tanto se puede sumergir un soldado en el rojo de una vena?


¿Qué tanto se puede sumergir un soldado en el rojo de una vena?

Frente a un pelotón, las posibilidades son muy bajas,
tomando en cuenta el miedo acumulado desde su captura.

En ese momento ya no se piensa en el hambre,
ni en la lujuria,
mucho menos, creo,
en Dios,
por que seguramente ya lo ha abandonado.

Quien podría salvarlo,
en un remoto caso de heroísmo,
se encuentra acorralado por las fuerzas del conformismo,
con una televisión encendida frente a él,
sintonizando el canal de la tendencia a seguir,
mientras se fuma sus sonrisas
y se reacomoda la almohada de la superficialidad.

Soldado vulnerable,
de piernas inestables,
figura bala fácil,
estructura deleznable.

“Voy a tratar de no acobardarme
a la hora del descenso,
pero no les prometo nada;
están temblando las piernas de toda una generación,
amaestrada por los ceros y los unos,
acomplejados estereotipos que Dios mandó
hacer a mano para cada uno de sus hijos;
les enviaré, en una botella,
el informe de los años subsecuentes.” Dijo el Soldado justo antes del ocaso.